VIAJE A SUIZA 2012

No a todo el mundo le ilusiona viajar y cuando lo realizan unos prefieren visitar grandes ciudades y monumentos, y otros, lo utilizan para enriquecerse de la majestuosidad de la naturaleza o la pluralidad cultural humana o simplemente para relajarse. Tampoco es igual en las distintas etapas de la vida. Lo que todos tenemos en común, es la ilusión que nos motiva a explorar en nuestro entorno, más o menos cercano, algo que nos atrae, pues, de lo contrario no iríamos.

Para redactar las vivencias de nuestro viaje, necesitaría tener una excelente desenvoltura y reflejar así, con claridad, los momentos vividos y en mi caso me considero impotente y con muchas limitaciones para hacerlo.

No obstante en mis sueños, recurro a mi "despensa mental" y veo como fogonazos, los asombrosos contrates topográficos y climáticos de este pequeño país, impresionado por sus enormes praderas verdes, con una diversidad de flores según la altitud, su variedad de lenguas y dialectos, sus distintas confesiones y la magnífica convivencia de sus habitantes, en sus peculiares Cantones y la forma democrática de tomar decisiones.

Cuando despierto en la noche, recuerdo la sencilla familiaridad de todo el grupo, con sentido del humor, altamente optimistas y, por lo menos a mí, me hizo reflexionar que gracias a este ambiente tan contagioso, consiguiera olvidarme por unos días de la dichosa "prima" de los recortes de los viernes y, lo más importante, de las tecnologías existentes, televisión, radio, prensa, móvil, automóvil. También hay vida, sin estos artilugios modernos. No hay más que contemplar las zonas rurales de ese hermoso país, arquetipo de la naturaleza, donde se siente la calma, la ecología, el esfuerzo personal, la confidencialidad de sus ciudadanos, que ha hecho posible que bajo sus edificios atesoren las riquezas de otros, precisamente, por saber guardar secretos y donde la prensa del corazón, tiene poco que hacer.

Trataré de refugiarme en la contemplación de las fotos, enviadas por distintos amigos, que unidas a las personales, servirán de sano comentario en diversas ocasiones.

Resumiendo mi valoración personal del viaje, de forma global, es positiva

Animo a los compañeros que con ilusión trabajan desinteresadamente, para unirnos y ofrecernos unos días de ocio distintos, que de forma individual, por lo menos en mi caso, no llevaría a cabo.

Camilo Davila Agulla


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